
Tregua en Irán, confianza del consumidor y reacciones estímulo respuesta
El alto al fuego ayer anunciado por Trump y después confirmado por Israel e Irán, aunque de manera algo ambigua, devolvió a los inversores la confianza necesaria para lanzarse de nuevo a comprar acciones y propulsaron las bolsas al alza hasta prácticamente alcanzar los máximos históricos de febrero. S&P500, 60 minutos. La reacción de los inversores a las noticias está siendo muy predecible, responde perfectamente al comportamiento conductual estímulo-respuesta y muy particularmente cuando las noticias son positivas… y algunos lo saben!. Compras poco meditadas, nerviosas incluso -FOMO-, sin proceso de análisis de riesgos directamente observables y sólo enfocados en obtener rentabilidad rápidamente. Las compras de ayer se produjeron a pesar de las dudas de que el programa nuclear iraní haya sido “aniquilado” como afirmaba Trump. La Agencia americana de Inteligencia Militar publicó un informe de situación indicando que los ataques bloquearon las entradas a dos instalaciones nucleares pero sin conseguir el objetivo de destruir las plantas de procesamiento subterráneas y, por tanto, las centrifugadoras siguen intactas. En los cantos de victoria ayer proferidos por Trump, se aprecia un cambio de terminología desde «aniquilar» las capacidades nucleares de Irán hasta afirmar ahora que han «degradado» las instalaciones nucleares. Tras los bombardeos