El teatro de las grandes finanzas vivió ayer una función digna de ser llevada a las salas, al menos de ser debidamente difundida.
Una hora antes de la apertura de Wall Street, apareció Bank of America -BAC-informando que las cuentas trimestrales presentadas el pasado 16 de abril no eran del todo fiables, había «perdido» $2.700 millones.
La complejidad de las cuentas bancarias al uso, más las enormes bolsas de «banca en la sombra» unidas a una opacidad generalizada e inquietante, pero consentida gracias a la permisividad de las autoridades, especialmente del patrón -Reserva Federal-, son condiciones tristemente necesarias para mantener el status quo.
Si los bancos operasen de manera transparente y explicasen sus secretos, el sistema fraccionario desaparecería en diez minutos. Los bancos reciben todo tipo de prebendas de las autoridades, manejan un dinero inventado por los Bancos Centrales que se encargan de fraccionar, reinventarlo y hacer crecer mediante promesas que nunca pueden cumplir… ojalá nunca llegue el momento de tener que comprobarlo.
Argumenta el banco que se trata de un error en derivados arrastrado desde que en 2009 BAC adquirió Merrill Lynch.
Increíble pero cierto y lamentable que un gran banco pueda «perder» semejante cantidad de dinero por tanto tiempo sin darse cuenta.
Es bochornoso que las autoridades, reguladores, SEC, FED… no hayan sido capaces de detectarlo. Hace escasas semanas, la FED completó un test de stress sobre las 30 entidades más grandes y consideradas sistémicas, BAC aprobó.
Inmediatamente después, el banco se lanzó a celebrarlo en los medios anunciando un ambicioso programa de aumento de autocartera y pago de dividendo.
Naturalmente ayer fueron suspendidos ambos y la cotización del banco sufrió las caídas más acusadas desde 2012, abajo más del 6% perforando de manera contundente su directriz de tendencia vigente desde diciembre de 2011.
BANK OF AMERICA semana
En fin, los bancos pueden cometer irregularidades, ilegalidades, desmanes (subprime el más brutal y con efectos que aún hoy sufren las economías y obligan a los Bancos Centrales a inventar el dinero que perdieron)… de forma casi impune.
Mientras, depositantes, ahorradores, accionistas y acreedores utilizando la información que proporcionan, creen saber la verdadera situación de las cuentas, con ellas forman opinión y arman la confianza necesaria para confiarles su patrimonio… ante la mirada impasible de sus protectores, las autoridades.
Recordemos un reciente caso de impunidad vergonzosa. MF Global, broker dirigido por Jon Corzine, ex CEO de Goldman Sachs, presentó la bancarrota, quebró, en octubre de 2011. El propio Corzine declaró más tarde, que había «desaparecido» el dinero de sus clientes, alrededor de $1.000 millones.
Se descubrieron evidencias de trasvase de dinero de clientes para cubrir garantías de posiciones perdedoras en derivados, actividad terminantemente prohibida.
Mr. Corzine, principal responsable y también ex-senador y ex- gobernador, está libre, nunca fue a la cárcel como ningún otro banquero (exceptuando a Madoff, castigado de manera fulminante por haber engañado a sus homólogos)
El sector financiero americano está estancadl en bolsa desde que hace 27 semanas comenzó un movimiento lateral dentro de un estrecho rango cercano al 10%.
La situación técnica es comprometida, cotiza por debajo de su mm de 50 sesiones aunque aún sobre la referencia más estructural que supone la media móvil de 200.
ETF FINANCIALS semana
El desconcierto de los inversores ante la «perdida» de $2.700 millones es susceptible de invitar al reposicionamiento de las inversiones y actuar aligerando su ponderación en las carteras, en línea con los grandes gestores. «Los bancos USA están presentando sus cuentas y en general defraudando expectativas mientras que grandes inversores como Soros, Buffett o Paulson están deshaciendo posiciones en el sector» comentado en el post del 23 de abril